La Fiesta de la Paloma, la Virgen de los Reyes, la Asunción… y el mundo de los toros. Día taurino por excelencia en el calendario nacional. “El que no torea toros el 15 de agosto no es torero ni torero”, dicen, aunque en casa siempre hay alguien mejor que los que están allí. Como en Málaga, donde siempre volvemos impulsados por el amor. Para tu ciudad y tu lugar. La vuelta a La Malagueta es una vuelta al ruido de cada año: ¡qué buena rehabilitación y conservación de su lugar! Un lugar que alguna vez debería haber abierto sus puertas el Sábado de Gloria, si no fuera por aquellas aguas torrenciales que empaparon las procesiones hace semanas, y que la Corrida Picasso vuelve ahora al calendario, aunque su formato cada vez está más diluido. Sin cartel circular, sin ese poderoso adorno del genial Laurent Palatier, y sin toreros -salvo Cayetano- disfrazados para la ocasión, el invento se va al carajo. Ni los areneros arlequines, ni la soberbia tarde de Emilio de Justo, que ahora relataremos, excusan el equipamiento de esta celebración en fase de colapso.
“Volveremos a hacer historia creando un año más un evento donde el toreo y la pintura se encontrarán en La Malagueta”, anunció el empresario Garçon. Se conocieron, sí; Pero eso es tanto como hacer historia… desde su muleta, donde pocos animales se atreven a decir que no. ¿Quién tuvo más suerte, Emilio de Justo con sus toros o sus toros con Emilio de Justo?
Fue un espectáculo de Borja Prado de principio a fin. Sobre su actuación: Deslumbrante en sus platos, mezclando seriedad y trapos, pese a que ninguno de ellos tiene cinco años. ¿No puede el toro quatreño cumplir todos los estándares necesarios? Y armonioso, aunque seguramente quienes lo hayan conocido no pensarán lo mismo, tan serio e insultante a pesar de sus bellas formas. Emilio de Justo se unió a él en una de las grandes tardes de su temporada, a hombros sobre una multitud de jóvenes aficionados, antes de las diez de la noche. El milagro de la transmutación había obrado, transformando al toro bravo: de inseguro a bueno; de falta de celo a vigoroso; desde promedio hasta (casi) extraordinario. Más que un milagro, algo ya inventado: saber posicionarse y cómo posicionarse. La muleta, mucho mejor agarre con la mano derecha. Mantiene su altura sin caerse; su distancia sin frenarlo; y su golpe cosido al hocico del toro. Otra forma cuando lo hace con la izquierda: más atrás, colocando allí el pico y convocando a la pitón contraria. Pero también ayuda porque les deja sin aliento.
Sobre todo destacó el equipo (se torearon tres toros por la lesión de Cayetano), destacó el belotero, el segundo, gravísimo en su inclinada altura. Volando, aunque abotonado. Que nunca recuperó y que nunca entregó. De Justo, orgulloso de su confianza, no le importó, no descansó en la contienda intrépida. Que nadie diga que “el toro está pillado”. Le ruega a su pandilla, que se ha tragado los cines, que lo dejen uno por uno, como hacen las banderillas. Belotero hacía girar sus mulas, marcando siempre sus deseos sin perder de vista al torero en cada corredor que se abría ante él. ¿De qué sirve este golpe cuando el toro está tan montado, tan serio? Excelente vuelo. Misma política con el cuarto que tenía mejor estilo. Y con el sexto, que pasó de la falta de estilo a los celos gracias a la valentía de su diestra. Impresiona menos involucrados Pablo Aguado, que vivió momentos importantes, y Cayetano, herido al enfrentarse al primero que tuvo la oportunidad de matar.
- Traje policromado de Cayetano de Picasso. Patada frontal, semiestirada y patada suave, la única que encaró (silencio).
- Coche fúnebre y azabache de Emilio de Justo. partido (dos orejas); hendidura (oreja); aviso tras slot y dos locuras (se escucha).
- Pablo Aguado de Rioja y Jet. Trazo largo (silencio); Aviso entre puñetazo, estocada larga perpendicular y dos tirones (silencio).
- Incidencias: Cayetano Rivera logró apuñalar al primer toro sólo tras sufrir una derrota al afrontarlo con suprema suerte. Acudió al centro médico, donde le diagnosticaron una “lesión por asta de toro en el codo izquierdo con hematoma en la zona lateral”.