Es un pez venenoso que al tocarlo tiene un efecto similar al de una medusa.
Tan curiosa como venenosa, la aparición del “dragón azul” ha obligado a cerrar la zona de Los Dos Roques, en el municipio de Gáldar, al norte de Gran Canaria.
El contacto con esta criatura azul provoca unas molestias similares a las de una medusa, por lo que el Ayuntamiento ha pedido a los bañistas que no entren al agua y avisen al servicio de emergencia si encuentran algún ejemplar.
Pequeño pero muy atractivo, el dragón azul es un animal de tan solo 2 o 3 centímetros con un llamativo color azul eléctrico y gris, que, aunque vive en mar abierto, puede ser arrastrado hasta la orilla y permanecer flotando en la superficie del mar. mar. mar. agua. Tropezar con él puede resultar doloroso, ya que almacena veneno en sus extremidades y ataca si se siente amenazado.
El dragón azul, o según su nombre científico “Glaucus atlanticus”, pertenece a la familia de los gasterópodos bípedos y ya ha aparecido en varias Islas Canarias y en la costa mediterránea. A pesar de su pequeño tamaño, son las especies más peligrosas de la familia de los nudribranquios.
Almacena el veneno en sus cerata (también llamadas “alas emplumadas”), aunque no es propio, lo “roba” a presas como medusas o fragatas portuguesas y lo utiliza para atacar cuando se siente amenazado.